Receta Suspiro limeño

¡Buen día, amigos golosos! ¿Alguna vez has probado un postre tan delicioso que te hizo suspirar de placer? Pues hoy te traemos justamente eso. Presentamos el Suspiro Limeño, un regalo culinario de nuestros queridos vecinos peruanos, que se ha vuelto tan popular en nuestra bella La Paz que casi lo consideramos nuestro. ¡Es hora de que aprendas a hacer esta maravilla en tu propia cocina! Prepárate para un postre que te transportará a través de las fronteras con cada cucharada. ¡Empecemos!

Los ingredientes para el Suspiro Limeño son los siguientes:

• 1 lata de leche condensada
• 1 lata de leche evaporada
• 3 huevos
• 1 taza de azúcar (200 gramos)
• 1 taza de oporto o ron añejo
• 2 cucharadas soperas de agua

La preparación es la siguiente:

1. ¡A mezclar! Consigue una olla con fondo grueso y únela con tus leches evaporada y condensada. Separa las yemas de los huevos y añádelas a la olla. Ahora, con un poco de paciencia y una cuchara de madera, cocina a fuego medio-bajo, revolviendo constantemente hasta que todo se integre maravillosamente.
2. La magia del color: A medida que vayas revolviendo, notarás cómo tu mezcla comienza a espesar y a tomar un tono acaramelado. ¡Es como ver una pintura en movimiento! Cuando veas este cambio, apaga el fuego.
3. Eliminando obstáculos: A veces, en la cocina y en la vida, tenemos que eliminar los obstáculos. Pasa la mezcla por un colador para deshacerte de cualquier residuo. Sirve en las copas y guárdalas en el refrigerador. Se merecen un descanso.
4. Azúcar, especias y todo lo agradable: En otra ollita pequeña, combina el azúcar, el Oporto y el agua. Deja que llegue a ebullición y mantén la calma durante unos 6 minutos sin remover. Recuerda, no queremos que se acaramele la mezcla, queremos que se sienta amada.
5. El vuelo del merengue: Ahora, agarra las claras de los huevos y bátelas con la batidora hasta que comiencen a formarse un merengue. Es como ver nubes formándose en tu cocina. Añade poco a poco el almíbar en un hilo fino, teniendo cuidado de que no esté demasiado caliente. Queremos que las claras se sientan cómodas.
6. El toque final: Ahora, agrega el merengue encima de la mezcla que habías reservado. Espera una hora antes de servir. Imagina el suspiro de tus invitados cuando prueben tu Suspiro Limeño, especialmente con ese toque extra de canela espolvoreada por encima​¹​. ¡Buen provecho!

Consejos y trucos

1. Cuidado con el fuego: Mientras estés cocinando las leches y las yemas de huevo, es importante mantener el fuego medio-bajo y revolver constantemente. Esto previene que la mezcla se queme o se pegue al fondo de la olla.
2. Paciencia con el color: Tómate tu tiempo para que la mezcla tome ese tono acaramelado. No subas el fuego para acelerar el proceso. La paciencia es clave para obtener el sabor y la textura perfectos.
3. Atención al almíbar: Cuando estés preparando el almíbar, no lo revuelvas mientras hierve. De lo contrario, podrías terminar con una mezcla cristalizada y no con un almíbar suave.
4. Temperatura del almíbar: Asegúrate de que el almíbar no esté demasiado caliente cuando lo añadas al merengue. Debe estar tibio. Si está demasiado caliente, puede cocinar las claras y arruinar la textura esponjosa del merengue.
5. Servir frío: El Suspiro Limeño es un postre que se sirve frío. Asegúrate de darle suficiente tiempo para enfriarse en el refrigerador antes de servir.
6. Toque final: La canela espolvoreada en la parte superior no solo añade un bonito toque visual, sino que también complementa maravillosamente el sabor dulce del postre. No te saltes este paso final!
7. Experimenta con licores: Si lo prefieres, puedes experimentar con diferentes tipos de licores en lugar de oporto o ron añejo. Solo ten en cuenta que el sabor del licor puede cambiar el sabor final del postre.

Recuerda, la práctica hace al maestro, así que no te desesperes si no sale perfecto la primera vez. ¡Diviértete cocinando!