2-3 cucharadas de miel o azúcar (ajustar al gusto)
Preparación :
Limpieza: Comienza lavando los arándanos bajo agua corriente fría para eliminar cualquier residuo o suciedad.
Cocido: En una olla pequeña, mezcla los arándanos con una taza de agua. Lleva la mezcla a ebullición y luego reduce el fuego. Deja que hierva a fuego lento durante unos 10 minutos. Los arándanos comenzarán a reventar, lo que es un buen indicador de que están listos.
Endulzado: Retira la olla del fuego y añade la miel o el azúcar. Revuelve bien hasta que el endulzante se disuelva completamente.
Colado: Utiliza un colador fino o una tela de muselina para colar el líquido en un recipiente, separando las pieles y las semillas. Presiona suavemente para extraer todo el jugo.
Enfriado: Deja enfriar el jugo a temperatura ambiente y luego refrigéralo hasta que esté bien frío.
Servir: Sirve el jugo de arándano en un vaso con hielo para una bebida refrescante y revitalizante.
Valor nutricional y beneficios
Valor Nutricional por Porción (1 Vaso):
Calorías: Aproximadamente 90-100 kcal
Proteínas: 0.4 g
Grasas: 0.1 g
Carbohidratos: 23-25 g
Fibra: 2 g
Azúcares: 20-22 g (incluye azúcares naturales y añadidos)
Vitamina C: 15-20 mg
Vitamina K: 36 μg
Manganeso: 0.5 mg
Beneficios:
Rico en Antioxidantes: Los arándanos son conocidos por su alto contenido de antioxidantes, que pueden ayudar a combatir los radicales libres.
Salud Urinaria: Tradicionalmente, el jugo de arándano se ha utilizado para prevenir y tratar infecciones del tracto urinario.
Mejora la Digestión: La fibra presente en los arándanos ayuda en la digestión y regularidad.
Buena Fuente de Vitaminas y Minerales: Incluye vitaminas C y K, y manganeso, importantes para la salud general.
Bajo en Calorías: Una opción saludable para quienes están controlando su ingesta calórica.